Día Internacional de la Lengua Materna

 ISA37792Día Internacional de la Lengua Materna:

presencia de la mujer, la naturaleza y la globalización

La salvaguardia de las lenguas se manifiesta a través del reconocimiento de la música, la danza, la literatura, la cocina y los rituales, expresiones y prácticas relacionadas con la tradición ancestral.

“La figura femenina desempeña un papel fundamental en el aprendizaje y la transmisión de conocimientos a partir de la lengua materna. Su intervención es vital en las estructuras comunitarias, sobre todo en las sociedades de tradición ancestral”, destacó en entrevista la antropóloga Estela Vega Deloya, investigadora de la Dirección de Desarrollo Regional y Municipal de la Dirección General de Culturas Populares, Indígenas y Urbanas (DGCPIU) de la Secretaría de Cultura, en el marco de la celebración del Día Internacional de la Lengua Materna, el 21 de marzo.

Vega Deloya resaltó la tarea de las mujeres como primeras transmisoras de la lengua en el hogar. “Ellas son, aun sin tener conocimientos de gramática o escritura, quienes les transmiten a sus hijos o nietos los conocimientos primarios del mundo”. Después, el círculo crece para extenderse a la familia, la comunidad y la sociedad global.

En México se tiene registro de 68 lenguas indígenas y alrededor de 364 variantes lingüísticas, según el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas. Para los pueblos originarios, la lengua va más allá del significado de una palabra oral o escrita, ya que engloba una cosmovisión y diversas prácticas rituales, artísticas y culturales, asociadas generalmente a la naturaleza.

La lengua no sólo es un ente vivo y en constante transformación, sino que también forma parte del Patrimonio Cultural Inmaterial. La salvaguardia de las lenguas se manifiesta a través del reconocimiento de la música, la danza, la literatura, la cocina y múltiples rituales, expresiones y prácticas relacionadas con la tradición ancestral.

Un ejemplo de los pueblos originarios respecto a la relación entre el ser humano, la naturaleza y el lenguaje se pone de manifiesto con “las plantas, flores y yerbas de traspatio, que tienen nombre y apellido. Para ellos son medicina, alimento y sustento. La lengua es un transmisor de la comunicación y las prácticas culturales la revitalizan”, argumentó Vega Deloya.

La DGCPIU ha tenido como propósito salvaguardar, fortalecer y difundir la lengua como Patrimonio Cultural Inmaterial de los pueblos originarios. Desde su fundación, ha impulsado actividades como el Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias (PACMyC), el Programa para el Desarrollo Integral de las Culturas de los Pueblos y Comunidades Indígenas (PRODICI), los programas de Desarrollo Cultural Regional y el Premio Nezahualcóyotl de Literatura en Lenguas Mexicanas, pionero en su tipo.

Alejandro Lozano Conde, subdirector de Programas Regionales Zona Oeste de la DGCPIU, resaltó que esta dirección establece una relación de equidad en el uso y apoyo a hablantes de otros idiomas distintos al español, como es el caso de las lenguas nacionales de México: “Nuestras lenguas originarias deben tener un plano de igualdad de oportunidades para su uso, manifestación, aprendizaje y reconocimiento”.

Con talleres, cursos, conferencias, mesas redondas, presentaciones editoriales, recitales, entre otras actividades, la DGCPIU apoya a los creadores no sólo en el ámbito de la lectura y escritura en lengua materna, sino que también en el de la creación literaria, prueba de ello es el Premio Nezahualcóyotl de Literatura en Lenguas Mexicanas”, comentó.

Sobre este certamen, Estela Vega destacó la creciente presencia de los poetas indígenas: “Con este premio es cada vez más visible el conocimiento de la cosmovisión de nuestras culturas tradicionales. Nos enseña, a través de los poemas y de la metáfora, la explicación del mundo que muchas veces en las ciudades no se comprende del todo y que en el idioma español las palabras a veces no alcanzan a expresar en su totalidad. Un poema en lengua materna es una breve explicación del universo de un pueblo”.

De esta forma, la capacidad de las sociedades tradicionales para sincretizar sus lenguajes originarios con el español y hacer que ambos coexistan dentro de su forma de entender el mundo y su entorno actual, representa uno de los temas de estudio, a la vez de materia a desarrollar en programas y actividades de la Dirección General de Culturas Populares, Indígenas y Urbanas.